No quería dejar pasar esta oportunidad y el cumpleaños de mi madre, para poner esta tarta estupenda, aunque las fotos no hacen campaña a favor. Es muy suave y con un sabor a limón delicioso. La repetiré para algún que otro cumpleaños o celebración, o mejor en cualquier ocasión, no importa, ya que es muy ligera y seguro que me queda mejor presentada.
Ingredientes:
- 1 paquetas de galletas maría
- 80 gr. de mantequilla
- 2 sobres de preparado de gelatina de limón
- 150 gr. de azúcar
- 250 ml. de agua mineral o filtrada
- 125 ml. de zumo de limón (serán unos 3 ó 4 limones)
- 500 ml. leche evaporada ideal (que esté fría de la nevera)
Para la cobertura:
- 1 sobre de preparado de gelatina de limón
- la cantidad de agua que indique en el paquete de gelatina
Molde: usé uno redondo de 24 cm. desmoldable.
Se deshacen las galletas hasta hacerlas polvo y se funde la mantequilla. Se mezcla formando una pasta y se coloca en el fondo del molde, apretando para que se compacte. Se mete en el nevera.
En una cazuela al fuego se pone el agua, el zumo de limón, el azúcar y los 2 sobres de gelatina. Se mezcla y se pone a fuego medio sin parar de remover hasta que está a punto de hervir. Se retira y se deja enfriar a temperatura ambiente.
Se prueba y si está muy fuerte de sabor, se puede añadir medio vaso de agua más.
Se prueba y si está muy fuerte de sabor, se puede añadir medio vaso de agua más.
Es muy importante que esté a temperatura ambiente.
Con la ayuda de la batidora de varillas se monta la leche evaporada (no monta como la nata, pero aumenta de volumen al coger aire y va quedando espumosa).
Se añade la mezcla anterior, es decir la gelatina poco a poco y se bate hasta que esté bien integrada. Se vierte en el molde y se alisa la superficie.
Se mete en la nevera unas 4 horas, hasta que cuaje.
Se mete en la nevera unas 4 horas, hasta que cuaje.
Para la cobertura:
Se pone al fuego el sobre de gelatina de limón y el agua que indique el fabricante y se remueve hasta que se mezcle. Cuando esté totalmente frío, se reparte por encima de la mousse de limón.
Se mete en la nevera, mejor de un día para otro.
Las letras las hice fundiendo chocolate y colocándolo en una manga pastelera.
Las letras las hice fundiendo chocolate y colocándolo en una manga pastelera.
Fuente: La cocina de Loli Domínguez
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